La visión musical que tengo me permite tener un espacio personal para encontrar tiempo de calidad con mis pensamientos, mis dolores internos, mis emociones no expresadas. La música es un vinculo directo con mi parte mas espiritual que me canta aquellas enseñanzas que en el día a día se me olvidan. Mis influencias musicales son muchas, desde el flamenco puro de mis raíces, pasando por la influencia de la música andina. La música para mi está presente diariamente, escucho distintos estilos musicales dependiendo de la actividad que voy a realizar, categorizo música para trabajar y focalizarme, música para hacer mis tareas cotidianas, para meditar, animarme o bailar y soltar el estrés. Mi intención, es usar el canto para sanar lo que llevo dentro, es mi manera de encontrar la mejor versión de mi misma. Ojala le sirva a alguien más mi manera de sentirla.

El enfoque musical que quiero transmitir refleja el arte como lenguaje universal donde la intención del canto llega como un soplo a quien escucha sin importar la distancia. Transmite el pensamiento y la intención de la persona, conectando a seres de distintas culturas con distintos propósitos. No hay estilos, hay maneras y sentimientos al cantar que llegan sin importar la manera de hacerlo.

Cada canción esta hecha con el propósito de trabajar un aspecto que resuene en mi corazón, que transmita un pensamiento donde poder conectar con quien lo pueda necesitar en distintas situaciones personales. Comienzo en mi interior con palabras que resuenan, que llegan en cualquier situación del día a día y gracias al equipo de producción musical se expande desde la idea original hasta llegar al producto final. 

Mientras compongo, el nivel de concentración sobre todo lo exterior se difumina, poniendo el foco en la musicalidad, en los instrumentos y voces, en la idea que quiero transmitir y simplemente emana.